XXXVII.- MANOLIÑO.

Personaje de ficción.

Manoliño es un personaje de ficción a quien le vamos a atribuir todas las anécdotas y situaciones más o menos esperpénticas ocurridas hace unos 70 años en las aulas del Centro de Enseñanza General, que era un Gran Colegio situado en la Calle Dolores, cuyo edificio fue ocupado en parte y posteriormente, por el Cine Avenida y después el resto por Simago y más tarde por el Corte Inglés. 

Las paredes de las aulas estaban llenas de mapas, carteles con imágenes de ciencias naturales como representaciones del cuerpo humano, frases famosas como "Conócete a ti mismo", aforismo atribuido a Sócrate, o "Examina diariamente tu conciencia" de Pitágoras,  y litografías representando hombres muy famosos como Shekespeare o Cervantes...

En cierta ocasión Doña Ignacia Ramos, señora de Carballo, que nos daba clase de Geografía e Historia, sacó a Mañoliño a la tarima, le hizo coger el puntero y le dijo que señalara en un mapa los límites de España por el Norte.

Manoliño titubeó y puso el puntero señalando más o menos a las islas Baleares...

Doña Ignacia le apuntó: Don Manuel el Norte es la parte de arriba...

Manoliño terminó sentado con un cero porque no tenía ni idea de los limites de España pero ya nunca olvidó que el norte era la parte de arriba.

Pasados unos, días ocurrió en clase de la señorita Ángeles que estrenaba una flamante licenciatura en Ciencias Naturales y una redecilla recogiendo la melena a la moda, aunque  nunca supe porque le llamábamos señorita si era casada.

Pues bien, la señorita Ángeles sacó a Manoliño para tomarle la lección y éste después del ritual de hacerse con el puntero tuvo que describir la posición del páncreas en la figura de la izquierda del lector.

Y Manoliño dijo:  -  el páncreas es una víscera situada al norte del estómago. -

Carcajada general y estupefacción de la señorita Ángeles que le preguntó ¿Como al norte?

- Si, en la parte de arriba, que se llama norte según Doña Ignacia....
                                -o-O-o-

Y ahora, algo que me contaron como verdadero pero que nunca me lo creí.

Ante la figura de la derecha del lector un profesor y un alumna después de señalar algunos músculos:

- Bien señorita, y ahora me podría decir que órgano muy importante le falta a esa figura. Titubea la alumna y el profesor para ayudar le apunta: - ¿ La pi....? y la alumna toda resuelta dijo  ¿la pirindola?

- No por Dios, señorita, la PIEL, la PIEL....