domingo, 18 de octubre de 2015

Pareidolias.

...Todavía me tiemblan las piernas.

Fernando Jiménez del Oso, precursor de  Iker Jiménez Elizari.
Hace algunos años, cuando todavía no era un carcamal y aún era yo vigoroso y fuerte, Fernando Jiménez del Oso me inició en el asunto de las psicofonías desde la pequeña pantalla  y me pase muchas horas de varias noches   con mi Grundig en marcha, grabando ruidos misteriosos, arrastres de cadenas, voces del más allá, golpes espaciados y resonantes, como de alguien terrorífico que llamaba a una puerta monstruosamente grande y pesada, con chirridos truculentos de bisagras mal engrasadas.
Muchas noches me acostaba espeluznado con los tolanos como escarpias y todavía tengo alguna cinta de magnetófono perdida por mi trastero  grabada con intentos fallidos  de establecer una conversación imposible  con un interlocutor aterrador de voz gutural fantasmagóricamente característica.
Sesión de espiritismo multitudinaria.
En el trastero tengo otras cosas raras más o menos raras que la cinta grabada con voces de ultratumba, como el cubo de Rubik, una regla de cálculo, un pié de rey,  un mazo de cartas del Tarot francés, un péndulo de radiestesia con el que buscaba objetos perdidos por mi casa con tanto éxito como cuando las buscaba sin ayuda paranormal, también tengo  un "blanco" que es, paradógicamente,  "negro y amarillo" para hacer diana con dardos, que veo mucho en películas inglesas ambientadas en pubs  del Soho londinense, y un tablero de hacer la  ouija que me vendió mi amigo Enrique antes de morir, etc. También tengo libros para hacer el horóscopo y un  manual de quiromancia, cosas ambas que practiqué con mucho éxito en mis tiempos guineanos.
Mi amigo Enrique hacía los tableros de ouija muy bien y los vendía al amparo de un comercio underground sui generis; underground en su acepción de clandestino, e incluso amañaba sesiones de ouija que  le servían para promocionar sus jugosas ventas.
Ouija de postín.
Mi ouija jamás la usé porque precisamente  Jiménez del Oso me disuadió acollonándome  con las terribles desgracias de todo tipo que caerían sobre mi, sobre mi estirpe y toda mi descendencia. Todavía hoy hay en la web múltiples anuncios  de  desgracias todavía más espeluznantes que las vaticinadas por Jiménez del Oso que pueden caer sobre los que la practiquen. Son tan terribles o más que las que cayeron cobre los descubridores de la tumba de Tutankamon.

Cara de Belmez en su estadio final.
Tengo que decir, entresacando cosas de este mezcladillo de recuerdos, que cuando aparecieron las caras de Belméz, yo también encontré en las viejas manchas de humedad de mi sótano y en las mi trastero algunas de las paredolias que ilustran este artículo.

Cara uno de mi sótano.
Yo me pasé muchos años de mi juventud estudiando todas las manchas de humedad por los rincones de mi trastero y todas las mancias que caían en mis manos y las que conseguía por intercambios como si  de cromos se trataran. Al final me quedé solo con la cartomancia (el destino a través de distintos tipos de baraja), la quiromancia (lectura de las rayas de las manos, es decir, la buenaventura gitana) y el espiritismo apócrifo. Todo llevado en plan cachondeo generalizado.
Manejé, para saber del destino, la ornitomancia (vuelo de aves) vigilando el comportamiento de las gaviotas que siobrevuelan Ferrol ciscándose a diestro y siniestro sin el menor respeto, la cristalomancia (bola de cristal), la croniomancia (cebollas) , la cleromancia, la electromancia, la obomancia, etc. Hasta sabia de hechizos de amor y de magia blanca  todo lo que hay que saber.
Cara dos de mi sótano.
Al principio fuí un seguidor devoto de los aciertos  de Fassman  y más tarde de los relojes parados y de las cucharillas dobladas de Uri Geller, y de la ufología de JJ Benitez,de quien compré varios libros incluido El caballo de Troya.
Cara tres de mi sótano.
Cuando estuve en Guinea dos larguísimos años por motivos profesionales, mi mujer alternaba seis meses conmigo y seis meses en la península para reponerse con los niños de los inconvenientes del clima tropical. Cuando estaba sin ellos el tiempo transcurría tedioso pero influído por apariciones del Morimó, noticias sobre orgías necrofágicas en el cementerio de Bata organizadas por obispos negros que la guardia territorial perseguía incansable con éxito muy relativo, y para romper el tedio,  la monotonía cotidianas y ayudar a olvidar noticias truculentas sobre casos de albinos negros desaparecidos misteriosamente. Los albinos eran seres malignos a destruir. Y cuando apareció Copito de Nieve, el único gorila albino conocido, la persecución y asesinatos de albinos se recrudeció en varias zonas africanas.

Uri Geller doblando una cuchara con el pensamiento.
JJbenitez me enseño todo sobre Ovnis e incluso me pasé
una noche mirando al cielo para verlos. No los vi.
Me ví haciendo sesiones de espiritismo en casa de mi primo Manolo, montando espectáculos de magia blanca y echándole las cartas a las vecinas de Carmen,  que era mi prima política y me secundaba con gran eficacia en hacer que nuestros espectadores creyeran a pies juntillas que yo tenía dotes paranormales y que me comunicaba con seres de ultratumba. Carmen poniía un velador ad hoc  que disponía en el centro de su cuarto de estar y  preparaba el escenario de aquellos cónclaves espiritistas poniendo velas por el suelo alrededor del pequeño velador. Carmen era mi cómplice para mover el velador en los momentos álgidos de la comunicación con difuntos e incluso le dimos un susto a Manolo  la primera sesión cuando el velador se agitó misteriosamente de un lado para otro. Después Manolo entró a formar parte de nuestra pandilla de embaucadores y nos hemos reído a mandíbula batiente cuando Pepe que era un cordobés supersticioso y crédulo, llamó a José Antonio Primo de Rivera a gritos, en el momento en que movimos el velador pasando los dedos pulgares por debajo de su tablero superior, lo que Pepe tomó como una señal clara para invocar a José Antonio porque quería preguntarle varias cosas. Aquella memorable sesión de espiritismo en casa de Manolo terminó allí entre risas generales y fue la última de mi vida..
Otro que tal baila. y que tampoco me convence.

En todo este tétrico ambiente también influían Boris Karloff, Bela Lugosi, Lon Chaney, Vincent Price, y Paul Naschy con sus respectivos personajes terroríficos llevados al cine como Frankenstein, Drácula o el Hombre Lobo, etc.

Pepe el cordobés era un gran tipo supersticioso y crédulo pero simpático y buena persona. Creía en el más allá y le tenía un pánico cerval a los gatos negros, a los días trece que  procuraba no salir de casa, que tenía una herradura detrás de la puerta, que  no encendía más de dos cigarrillos con la misma cerilla y  si se le derramaba la sal le subía la fiebre, etc.
En Santa Isabel de Fernando Póo se organizaban novilladas en una plaza desmontable y solían traer de la península algunos novillos de más para tener disponibles seis novillos seis a las cinco de la tarde del día de la corrida porque  era muy fácil que se rompiera alguna pata de novillo durante la travesía en barco de Cadiz- Tenerife- Santa Isabel si se agitaban demasiado las aguas del golfo (naturalmente del Golfo de Guinea).
Pues una vez que hubo un novillo sobrero porque las aguas del golfo estuvieron tranquilas, Pepe el cordobés se empeño en torearlo. Y lo consiguió...
Y llegado el día, el cordobés esperó al único novillo único a las cinco de la tarde, lo esperó a portagayola delante del toril, de rodillas como es preceptivo, y al hacer la larga cambiada, Playero que así se llamaba aquel novillo resabiado empitonó a Pepe y lo mandó al hospital afortunadamente solo con una clavicula rota, digo afortunadamente porque no vertió sangre.
Iker Jiménez Elizari y Caemen Porter.
El grito también se aparece.
El caso es que yo,  enterado de aquel lance, le eché las cartas a Pepe y empecé diciendo aquí había un campo de oro con una mancha de sangre, Pepe por su parte me aclaró, como hacía siempre, que  el campo de oro era arena y la sangre una cogida que había sufrido. Yo le aclaraba que realmente el as de copas sobre los oros era un símbolo porque sangre lo que se dice sangre no había y él me axplicó que efectivamente la cogida se saldó con una clavícula rota. Entonces me atreví a decir que había mucha gente que lo quería bien pero que había gente que lo quería mal. Entonces Pepe me explicó que lo quería mal una cuñada que era una víbora.
En este momento apareció  la mujer de Pepe, suspendimos la cartomancia y Pepe le dijo más que entusiasmado a Merche, su mujer,  que yo era in tío bárbaro que le había acertado todo y que echaba muy bien las cartas, pero no dejó que le echara las cartas a Merche.

Este es el espiritu fantasma del modelo de El grito. Aparece todas la noches
con los ojos verdes y muy brillantes.
¿Y porqué me pongo a contar es cosas ahora cuando ya solo cree en pareidolias Iker Jiménez?

Si Iker y Carmen supieran lo que está pasando seguro que harían un programa sobre cierta casa de la calle Real de Ferrol,

En la Calle Real de Ferrol  hay un edificio fantástico, que alberga una Comunidad fantástica, dónde vive gente fantástica y donde ocurren cosas fantásticas. Entre otras cosas se pone en marcha solo,  cierto televisor a pesar de que ya le cambiaron la botonera dos veces y cuando menos se piensa arranca el extractor de gases de la cocina y se para solo sin más intervención.
Ya aparecieron varias caras por todas partes, que están reproducidas aquí y se oyen ruidos de arrastrar cadenas.
El precio del edificio se está disparando y los actuales propietarios están recibiendo ofertas que empiezan a ser  exageradas.

Yo estoy acostumbrado a mi edificio donde no ocurre nada del otro Jueves, donde vive una comunidad cutre que no sabe nada de la ley de propiedad horizontal. por lo que hay frecuentes discusiones interminables. etc.

Farolillos preparados por Cris, observense las caras que aparecen reflejadas, especialmente en el farolillo que está
en segundo lugar  contando desde la izquierda un poco detrás.
El caso más aparatoso es que Cris está preparando objetos para adornar su casa en Halloween y precisamente en uno de los frascos adornados con siluetas de murciélagos y gatitos negros pintados que preparó, aparece y desaparece la cabeza del espiritu fantasma que hizo de modelo de El Grito. Hay quien lo ve en los frascos de todos estos frascos de Cris.
Y mientras Cris lo pasa bomba.








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